VIVIR LA VEJEZ COMO UNA OPORTUNIDAD

Cuando se revisan páginas web y algunos artículos sobre los mayores LGTBI, se observa un predominio de temas relacionados con la soledad, los armarios y el silencio, el edadismo y la homofobia. Se puede concluir que se trata de una minoría social i además, minorizada por las fuerzas sociales dominantes (revisado por Gimeno, 2014).  Se han hecho algunos estudios sobre la situación de la gente mayor LGTBI pero han sido con muestras insuficientes y con estudios muy sesgados ya que las muestras suelen obtenerse de asociaciones o de grupos sociales concretos. Parece que se están recogiendo testimonios de personas LGTBI que permiten dibujar los escenarios que vivieron y su realidad actual de una manera bastante precisa. Parece que este método, muy utilizado para la recuperación de la memoria histórica a partir de la Segunda Guerra Mundial, no permite el estudio poblacional en términos de proporciones y probabilidades. 

La entrada a la tercera edad suele vivirse con sentimientos de pérdida. En realidad, hay pérdidas físicas, de capacidades y del entorno, aunque la actitud edadista de la sociedad hace que estas pérdidas se vivan de manera más exagerada y cuesta no interiorizar la asociación de dejar de trabajar con la pérdida de derechos y libertades.  Por ejemplo, se atribuye a la edad un deterioro cognitivo no demostrado. Lo único que se ha podido demostrar es una cierta pérdida de la eficacia de los procesos cognitivos y un enlentecimiento de la recuperación de la información de la memoria. Esto no justifica que se trate a las personas mayores como si fueran niños (García et al., 2015).  

Aunque puedan tener una distribución de indicadores sociales diferentes y necesiten ámbitos de socialización más adaptados, las personas mayores LGTBI comparten las principales inquietudes e intereses con los mayores heterosexuales. Hay aspectos positivos de todos los mayores que hay que potenciar para que puedan seguir siendo útiles a la sociedad. Las personas mayores tienen una mayor capacidad para relacionar lo aprendido, es lo que se conoce como conocimiento experto. Esta habilidad consiste en la disposición de más estrategias de optimización de sus actividades, además de una mayor capacidad de compensación de sus cambios vitales y de las posibles pérdidas. Esto permite una mejor autogestión de sus recursos cognitivos.  

A partir de esta edad, parece que hay una revalorización de la afectividad y una relativización de la actividad sexual que permite adaptar la expresión emocional a los déficits físicos. Este cambio permite la exploración de alternativas de expresión de los sentimientos y una pérdida de fuerza de los estereotipos sexuales sociales, lo que permite una expresividad de las emociones más personalizada o creativa (Krzemien et al., 2018). 

El aumento creciente de la población mayor ha establecido la fuerza del voto en aproximadamente un 24% y parece que fue decisivo en la victoria del PP (El decisivo voto de los mayores, El País, 21-06-2016). Esto no ha generado ningún beneficio al colectivo de personas mayores que sólo ha obtenido una escasa respuesta política limitada a dedicarles un hueco testimonial en sus programas electorales. 

Parece que es necesario asociarse y organizarse para poder exigir recortes en la merma de los derechos. Es lo que se ha llamado el poder gris o el lobby gris que todavía goza de poca fuerza en España. Esta forma de presión social se materializa a través de agrupaciones de defensa de intereses del colectivo como:

Las agrupaciones de potenciación de políticas públicas para personas mayores lo que implica una presencia activa de representantes del colectivo en los espacios de toma de decisiones.  

Los grupos de usuarios de residencias o de otros tipos de viviendas para mayores, con funciones de observatorio y de información de servicios a los usuarios. 

Agrupaciones que fomenten el contacto intergeneracional con colaboraciones en actividades conjuntas como puede ser el cuidado de huertos, clases particulares, organización de excursiones y otras actividades culturales, control de indicadores medioambientales, etc.  También se pueden organizar actividades más estables en el tiempo como el desarrollo de proyectos de creación (compartiendo espacios y proyectos) y la organización de encuentros dentro de una disciplina concreta (exposiciones, sesiones de cine, conciertos).  Otras actividades que son necesarias son las de la recuperación de la memoria histórica y el trabajo con testimonios. 

Grupos que promocionen la participación de los mayores en una negociación colectiva de las pensiones y en las modificaciones del sistema de pensiones. 

Grupos que reivindiquen el derecho a decidir la forma de convivencia y las personas con quienes queremos convivir mediante propuestas de reformas de normativas, acompañamiento, información y facilitación de recursos (cohousing, viviendas compartidas, vivienda tradicional, espacios de relación accesibles). 

Estas propuestas son una muestra de experiencias que se están realizando en distintos países y todas ellas tienen en común que para conseguir algo, hay que salir de las zonas de confort particulares y tener un papel activo en la dinámica de la sociedad.  

Bibliografía

García, M.A.; Moya, L.M. y Quijano, M.C. (2015) Rendimiento cognitivo y calidad de vida de adultos mayores asistentes a grupos de tercera edad. Acta Neurol Colomb 31 (4): 398-403.

Gimeno, B. (2014) Vejez y orientación sexual. http://www.fundacion26d.org/wp-content/uploads/2014/06/informe-mayores-lgtb.pdf

Krzemien, D.; Richard’s, M.M. y Biscarra, M.A. (2018) Conocimiento experto y autorregulación en adultos mayores jubilados profesionales y no profesionales. Avances en Psicología Latinoamericana 36 (2): 331-344

Narración 14

Siempre queda algo.

María aun no entiende el motivo por el que volvió a casa de sus padres. Ahora, tenía que adaptarse a su nueva vida y, dentro de pocos días, a otra vida aún más nueva. Ha sido largo el tiempo que ha vivido en el bloqueo que perturba los sentidos y entre el babeo que añade significados oscuros a la palabra articulada. Ha sido mucho el tiempo que ha vivido privada de sus propios deseos y haciendo lo que otros creían que estaba bien. Ha pasado tanto tiempo desde que salió de la casa a la que ahora vuelve que ya no la reconoce. Y es que, el tiempo le ha cubierto la piel de costras que costarán de arrancar porque se han vuelto su verdadera piel. Costras insensibles e incapaces de hacer temblar pero, limitan los movimientos y contienen todo lo que de humana le queda a María; incluso a veces huelen a algo ya pasado.

María sigue caminando hacia el lugar donde viven su madre y su hermana. Anda intentando fijar la mirada en un punto que no encuentra sin mirar a los lados. Casi no pestañea, es como si el paisaje se hubiera cansado de María y la hubiera abandonado. María ha perdido su escenario y sigue andando en modo automático mientras intenta recordar la última vez que alguien le deseara los buenos días o que le preguntara lo que le gustaría hacer. Es cierto que María es hija de la globalización e Internet eliminó, desde hace tiempo, muchos motivos para encontrarse con alguien. Ya desde antes de ingresar en el centro de salud mental, María practicaba muy poco el arte del encandilamiento de desconocidos que le acabaran de presentar mediante la interpretación de versiones mejoradas de ella misma. En aquellos tiempos, todo parecía más fácil y la portabilidad de las emociones había ido sustituyendo al ritual de salir con alguien. Durante su encierro, tuvo momentos para mantener relaciones esporádicas con gente desconocida de lugares desubicados de su mapa interior. Encuentros virtuales que siempre terminaban como habían empezado: con un clic. Y esa era la vivencia del amor inherente a la naturaleza temporal de María. Y es que, lo único que tenía María era tiempo libre para dar vueltas por la red y así, aprendió a construir relaciones tan nuevas como superficiales. Cada vez que se sentía sola recurría a Internet y cada día se sentía más sola, con una soledad de las que muerden la barriga y arrancan todo deseo, sólo la acompañaba la obsesión por acumular saludos anónimos.

No sólo era la soledad lo que le daba esa imagen espectral a María, también había que tener en cuenta lo dañada que estaba su memoria. Para ella todo era nuevo, nada tenía referentes que pudieran dar significado a las impresiones de su retina, para volver a ser ella deberá revivir sus momentos felices y aceptar sus derrotas. Ahora su vida es un montón de retales sin sentido. Este fue el precio que tuvo que pagar para socializarse: tuvo que dejar que quemaran los malos pensamientos y los sustituyeran por otros domesticados y a semejanza de lo deseable por la mayoría, es mejor no tener ninguna idea que pueda entorpecer el paso de la vida. Cada vez que afloraba un pensamiento disonante con la razón ajena, había que eliminarlo con corriente eléctrica, dos veces por semana, o con un jarabe limpiador de ideas parásitas. Así, al cansancio doloroso de María lo llamaron éxito del tratamiento.

El ingreso de María en la casa de salud mental debería haber durado hasta su fallecimiento pero, la incluyeron en un estudio piloto sobre la capacidad de control del paciente con una buena respuesta al tratamiento institucionalizado. El azar del doble ciego hizo que la enviaran a su casa a preparar su antigua habitación para volver a habitarla. Dentro de pocos días, María ingresaría en una comunidad terapéutica que le daría la libertad para estar en su casa los festivos y los fines de semana.

María nunca supo el diagnóstico que motivó su ingreso. Sigue pensando que fue obra de sus padres, de exageraciones al explicar detalles y de sus momentos de baja reacción. Aceptó lo que decían porque no encontraba las palabras generadoras de respuestas y tampoco encontró una cadencia convincente para sus sollozos. Con el tiempo, María ha tenido acceso a su historia clínica donde constan más de cuatro diagnósticos distintos que no son más que cuatro formas diferentes de nombrar la locura, lo que no es normal. María tampoco recibió un tratamiento específico y adecuado a alguno de sus diagnósticos, recibió algo de tratamiento enfocado a la eliminación de la capacidad para generar problemas aunque esto significara el inicio de un proceso de cronificación irreversible.

María llega a casa de su madre y se queda mirando la puerta para confirmar que aquella imagen no es un parásito de la memoria. Cuesta ir por el mundo con una memoria inventada que construye la realidad a partir de manipulaciones de ensueños. María se siente sometida a una memoria caprichosa que recuerda y borra, que da forma a una emoción mientras va desapareciendo a la vez. La puerta frente a la que estaba no era el producto de una mirada de racionalidad sometida al uso de sustancias perturbadoras de la lucidez sino que era una imagen que seguía anclada a la realidad vivida durante los muchos años que vivió en esa casa. Y llamó al timbre. Y abrió su hermana. Hacía un rato que la esperaban. Se intercambiaron saludos y besos. Sin casi darse cuenta, María ya estaba en el comedor de su casa. Su madre, sentada en el sofá, leía un libro que dejó sobre la mesa auxiliar que tenía cerca. Estaba vacío el sillón donde solía sentarse su padre. Su madre le recordó que había muerto cuando María aún vivía allí y mientras, se levantaba para abrazarla. María no recordaba los muchos días llorando y buscando algún indicio de vida paterna, era como si hubiera digerido esa parte de su vida y sólo podía recuperar sensaciones exageradas y sin forma. Ahora debía reconstruir ese duelo sin poder utilizar el rastro de experiencias previas y sin poder retomar ningún después.

María va a su habitación, amontonaron allí todas sus cosas. Una vez dentro, cerró la puerta y se encontró con su pasado. Aunque nunca tuvo tendencia a guardar cosas, la habitación estaba llena de muebles, trozos de objetos de los que colgaba un enchufe y cajas que contenían cosas de pequeño tamaño. Lo único que tenían en común todos esos objetos era su utilidad, no servían para nada aunque parece que el descubrimiento de la basura vital es algo que caracteriza a los reencuentros. María empezó a meter cosas en bolsas de basura y a llevarlas al contenedor. Cada vez que pasaba por delante de su madre o de su hermana, le dedicaban una sonrisa. Estaban contentas de volver a tenerla en casa. María tardó varias horas en poder hacer un poco de espacio para el contenido de su maleta. Cuando iba a guardar la ropa interior en uno de los cajones, encontró una caja de zapatos sin tapa que contenía objetos de distintas naturalezas que posiblemente acabaron allí por no haber encontrado un cubo de basura cerca. De todas formas, esa caja llamó la atención de María, estaba muy bien guardada. Era lo único que habían respetado durante su ausencia, todo lo demás estaba amontonado en lo que parecía un festival de la obsolescencia.

María se sentó en el borde de la cama con la caja en su regazo. Pensó que hay muchos motivos que invitan a guardar cosas. A veces se guardan cosas singulares de las que no volveremos a encontrar nunca nada parecido. Hacen sentir diferentes. Otras veces los objetos no tienen ninguna carga semiótica y sólo sirven para dar sentido de contenedor al envoltorio. Otras veces, en la cajas se guardan recuerdos, objetos con capacidad evocadora de olores y sensaciones, objetos que al tacto hacen revivir escenas unidas por un hilo narrativo que va trenzando la vida ficticia con los hechos reales. También hay una tendencia a guardar objetos- símbolo de algo oculto. Algunos de estos símbolos representan aquello que no se puede contar y que queda en la oscuridad de los fondos de los muebles para que nadie pueda interpretarlos, son los objetos- culpa. También se pueden guardar objetos- recuerdo de encuentros ganados y de amores perdidos, son los trofeos que arrancan sonrisas. Parecía que la caja de María contenía recuerdos de determinadas situaciones. Y es que, a veces, los recuerdos cristalizan perpetuándose en cosas un poco difíciles de descifrar. María se dejó llevar por el azar de los objetos que iban cayendo en sus manos.

Lo primero que cogió fue una foto del colegio. Parecía del último curso. Ahí estaba María sonriente. Era una impronta de una verdad distorsionada, como si hubiera sido una etapa feliz aunque la felicidad en la escuela fue algo muy esporádico. Recordó las mentiras que contaba a sus padres de pequeña y a sus amantes de más mayor. Las adornaba hasta convertir una falta en algo fantástico. La intencionalidad de la mentira siempre fue la misma: confundir hasta ofuscar para hacer creer al otro cualquier cosa. No eran simples mentiras de las que despistan y alejan de la culpabilidad, eran representaciones de una realidad que nunca ha existido. Pegado a la foto había un trozo de papel con la dirección apuntada de un refugio de pescadores en el acantilado donde María pasaba los veranos con su familia. No puede recordar quien escribió la dirección pero, la lectura de esta nota la lleva a una fiesta que fue y se olvidó de recoger a su hermana de la academia de baile. Fue la primera vez que bebió alcohol hasta caerse y fue la primera vez que dijo sí a la convivencia con quien entonces era su pareja. Un trozo de hilo de nailon le recuerda a la guitarra con la que acompañó la canción del sí. María explora la memoria a través de los puentes de la lógica, intentando recordar las notas y sólo consigue dejar la mente en blanco. No puede ser que se haya perdido la canción de su enamoramiento, la que cantaba en la playa al inicio de su convivencia. Convivencia nefasta que no llegó ni a empezar y que se llevó a la canción. Estas pérdidas de conexión forman un rosario de espacios vacíos separadores de escenas que convierten el pasado en imágenes sueltas con poco sentido.

Poco a poco se va dando cuenta de que no hay objetos sin sentido, todos tienen un poder evocador. Mientras mira fijamente la piedra que tiene en sus manos, ésta se va convirtiendo en la visión de un peñasco recortado de donde cayó la pareja de María durante una discusión a causa de una tercera persona. Y es que le dijeron que había quedado con una amante de hacía años. Fue sólo un traspiés. No puede ser que María tropezara y aprovechara su caída para cogerle los tobillos y hacer que cayera al precipicio. Tardó dos días en morir en soledad, María estaba detenida y llevaba en el bolsillo la piedra con la que tropezó durante la discusión.

Todas estas escenas han quedado difuminadas en la memoria de María como si fuesen una narración ajena, una fantasía que da al conjunto de vivencias un aspecto de falsedad. Toda una ayuda para aseptizar el pasado. Y es que, el mundo de los recuerdos no permitía que María se adaptara al presente y sólo podía diseñar sinuosos caminos de vuelta al pasado que no necesitan una lectura lineal de la vida. María no quería entender nada aunque ahora, los objetos de la caja rebosaban significados. De nada servían ya las memorias construidas con percepciones, fármacos y manipulaciones de deseos.

Fue su madre quien más insistió al forense que forzara un diagnóstico que librara a María de una larga condena. Y María se libró ingresando en una casa de pensamientos trastornados.

Les dimensions de la malaltia

Sembla contradictòria l'associació de malaltia a quelcom anormal quan en realitat tothom ha patit alguna malaltia al llarg de la seva vida i tothom està destinat a patir-ne una de greu que el descavalcarà de la vida. I és que hi ha una tendència a amagar el patiment i la mort. Ni tan sols es tolera la idea que el benestar és un estat transitori. Hi ha la creença que el que s'amaga en un discurs no existeix. A més, la pressió mediàtica ens fa viure a Disneylandia i expandeix la idea que el benestar és un article de consum. Tot això es pot objectivar en els discursos d'alterització dels malalts, en els intents d´institucionalització dels pacients i en l'ocultació de la mort tot situant els tanatoris i els cementiris als afores de les poblacions i amb la prohibició de la circulació dels cotxes fúnebres per zones transitades i nuclis urbans. Cal afegir els discursos culpabilitzadors sobre determinades malalties catalogades com avergonyidores com l'hepatitis C o el càncer de pulmó que es consideren a causa de conductes impròpies del malalt o les malalties mentals, ja que no compleixen les expectatives socials del rol assignat.

 

El marc teòric que aporta les claus interpretatives d'aquest escrit inclou les qüestions sobre naturalesa i cultura que intenten donar resposta a la definició de naturalesa humana. Així, el culturalisme postula una discontinuïtat del fenomen humà que queda definit segons les diferents cultures. Aquest relativisme cultural es contraposa, d'alguna manera, amb el naturalisme que descriu la condició humana com quelcom biològic i determinat i explica els canvis d'acord amb l'evolució que genera unes modificacions graduals i continues.

 

Marilyn Strathern (revisat per Edward, 2016) afirma que el concepte de naturalesa no contempla una descripció del món ni una referència a un lloc no urbanitzat sinó que es tracta d'un constructe cultural que s'oposa a la vida en societat. D'aquesta manera, el concepte de natura s'explicaria mitjançant els camps semàntics de “salvatge”, que en anglès també inclou l'accepció de “bogeria”, i “domèstic” entès com allò que no és públic. Aquest marc teòric descriu els constructes com productes d'oposicions binàries i no com conjunts de camps semàntics. D'aquesta manera, la cultura es definiria com el producte dels actes volitius i intencionats i la realitat estaria representada per la interacció dinàmica d'ambdós dominis, el de la naturalesa i el de la cultura. Aquestes interaccions entre elements de diferents espais dialèctics proporcionen diferents realitats en funció del marc interpretatiu particular de cada individu d´una comunitat concreta. D´aquesta manera, els marcs contextualitzadors de les vivències s'estructuren, per a cada persona i amb inclusió de les malalties mentals, segons unes dimensions determinades (orgànica o biològica, psicològica i social) (Martínez, 2000) . Aquesta plasticitat que permet adaptar les tres dimensions dels marcs contextualitzadors només és possible si s´utilitzen models dinàmics d´estructuració com és el cas de les interaccions descrites per Strathern que permet redefinir les tres dimensions dels espais dialèctics per tal de poder situar les diferents realitats en els espais públics de comunicació.

 

L´esquizofrènia també s´estructura en funció de les tres dimensions determinants de la vivència de la realitat. Segons la seva dimensió biològica es pot definir com un estat patològic (disease) en la mesura que s´allunya de l´homeòstasi psicològica i genera patiment. Malgrat que no s´ha pogut demostrar un conjunt de conductes i experiències típiques de l´esquizofrènia i, a més, el seu diagnòstic no té validesa predictiva, hi ha determinades dades objectives que presenten una distribució diferencial en els pacients diagnosticats d´esquizofrènia com determinades mutacions puntuals de l´ADN, una hiperactivació de les vies dopaminèrgiques cerebrals o bé canvis en l´activitat metabòlica cerebral (Read, Masher i Bentall, 2006) que recolzen el component biològic de la malaltia encara que no ofereixen una descripció clínica predictiva. El diagnòstic d´esquizofrènia és en base a la clínica i cal  un conjunt de criteris comportamentals persistents en el temps per al seu diagnòstic. Les dades biològiques no poden explicar el comportament ni la manera de construir la realitat, cal doncs, contemplar la malaltia dins del seu context cultural per tal de poder conèixer els canvis dels significats dels símbols identitaris que es modifiquen amb l´estat psicòtic. En aquest context, sembla difícil definir l´esquizofrènia com un estat patològic (disease) determinat només per canvis biològics.  Cal afegir a la definició d´esquizofrènia l´estil d´emmalaltir (sikness) determinat pel significat social de la malaltia i el rol assignat a aquests pacients i s´ha d´afegir la vivència particular de la malaltia (illness).

 

Molts dels professionals de salut mental tendeixen a estigmatitzar els pacients tot despersonalitzant- los i etiquetant- los de malalts crònics i perillosos. Només cal veure les notícies sobre agressions que solen ser a mans de “malalts mentals”. I és que ningú “normal” podria fer actes de crueltat semblants. Potser una de les funcions socials de la malaltia mental sigui la d'excloure determinats atributs de la definició de naturalesa humana socialitzada. Molts pacients diagnosticats d'esquizofrènia rebutgen l'àmbit de la clínica i de la industrialització de la salut mental i proposen una reconstrucció de la identitat que els permeti tenir una vida activa en els espais públics. Molts pacients defineixen la bogeria com un lloc “donde somos situados en tanto Otros como diferentes, como anormales, como extraños e incluso como monstruos. Como si de nuestra singularidad como seres humanos se desprendiera una presumible confrontación constante y perpetua contra la razón, la norma y su dictado...” Així és com se senten molts pacients: incompresos i sense drets fonamentals, amb un dolor creixent que surt a l'exterior “partiéndolo todo: estructuras, lenguajes, significados, sentimientos, relaciones...”, se senten tractats com delinqüents socials en espera de la condemna (Velasco, 2013). S'ha demostrat que més del 90% dels pacients consideren un element clau en la seva vida el fet de sentir-se connectats amb el seu entorn més proper (família, parella i/ o amics) (Proyecto Voz, 2016). Aquestes necessitats afectives és el que la societat els nega amb la institucionalització, els tractaments farmacològics i amb la negació de drets fonamentals com la sexualitat o l'habitatge.

 

Es pot afirmar que hi ha una construcció social pròpia de cada cultura i època i diferents conceptes i vivències de l'esquizofrènia però, cal determinar un concepte unitari. Per tal d'entendre el constructe multidimensional de l'esquizofrènia cal obtenir les dades explicatives de la interacció dinàmica de les diferents dimensions en les quals es projecta. Cal doncs, abordar “l'home total” en tots els seus aspectes tal com apunta M. Mauss (1902- 1958) afirmant que l'ésser humà té dues naturaleses, la individual i la social. Aquestes naturaleses no estableixen una entitat amb nivells jerarquitzats sinó que s'integren (el que és orgànic amb el que és psicològic o social) per formar el sentit de la consciència de si mateix (self) segons l'experiència viscuda contextualitzada per les normes socials, les ideologies i la subjectivitat. Les interaccions entre els determinants de la identitat personal proporcionen una realitat cultural dinàmica que es desenvolupa al llarg de la història.

 

Es pot considerar que el llenguatge és un element estructurant del pensament i que les diferents formes lingüístiques tradueixen diferents formes de pensament i de percepció. La hipòtesi relativista proposada per E. Sapir (revisat per Fernández, 2003) afirma que la combinació de llengua, cultura i psicologia determinen la visió de la realitat. En aquesta visió, el llenguatge etiqueta la realitat de tal manera que determina l'estructura del pensament. Al seu torn, el pensament proporciona les unitats conceptuals que determinen la càrrega semàntica del simbolisme lingüístic. Els diferents codis lingüístics suposen una manera particular de mirar i d'interpretar la realitat, ja que la llengua orienta en la selecció del que és rellevant de l'experiència i cal comunicar-ho. D'aquesta manera, es pot considerar el llenguatge com un reflex de la vivència del pensament i de la cultura però no és el seu determinant. En aquest sentit, s'han fet nombrosos treballs sobre el llenguatge de pacients esquizofrènics per tal de conèixer la seva estructura de pensament. Molts d'aquests treballs descriuen trets més propis dels infants que mostren una estructura de pensament immadura més que aberrant (Dörr, 2010).

 

Cal afegir que, en aquest treball, el concepte de llenguatge s'emmarca dins de la definició de semiòtica, és a dir, que s'enten el llenguatge com el mecanisme de dotació de significat dels símbols en el procés comunicatiu i la seva funció en el si de la societat i no només com la paraula escrita o articulada.

 

Un dels trets freqüents en l'esquizofrènia és l'aplanament afectiu que es mostra en la filmació per un mateix to de veu i per una gesticulació i una mirada que no acompanyen al contingut del monòleg (El desencanto 8:40- 12 https://vimeo.com/155844430). En el discurs es troben neologismes com “asma es salif” que es repeteix tot seguit o un canvi de llengua (en el poema el noi del sucre) que no aporten contingut semàntic i sembla més aviat un recurs de la cadència. El vocabulari és restringit i amb tendència a la repetició (“fetiche”, “adoro”). Panero mostra un comportament verbal dominat per estímuls que són immediats en el discurs (paraules semblants com “pagano o cristiano). Aquesta immediatesa de l'estímul també es veu quan diu que viatja amb els “fetiches” que en realitat són els objectes que té sobre la taula. Això també es pot explicar per un fenomen de sobreinclusió que és un reflex de la dificultat d'atenció que provoca un fracàs per inhibir les associacions discursives no rellevants. El discurs de Panero és fragmentat i, amb uns canvis de frases marcats per asíndesis i metonímies. En aquests punts del discurs es fan més evidents els bloquejos mentals i la dificultat per mantenir l'atenció focalitzada (cerca de nous objectes sobre la taula) (Insua, Grijalbo i Huici, 2001).

 

En l'esquizofrènia no només hi ha distorsió en l'expressió i en l'estructura del pensament sinó que també pot haver-hi canvis en la vivència emocional de l'entorn. Això es pot veure millor en la pel·lícula Shuter Island en la que es mostra els resultats del pensament paralògic i de la manca de filtre per cercar els significats concrets de les coses segons el context i poder evitar així les il·lusions per generalització de l'estímul. El protagonista és insegur, desconfiat i amb somatitzacions. Al final, el pacient recupera el sentit de la realitat i decideix sotmetre's a una lobotomia (la pel·lícula està ambientada als anys 50) per tal de poder alliberar-se de la culpabilitat per haver matat la seva dona. I és que les malalties també poden ser un refugi.

 

Es pot definir l'esquizofrènia com una alteració de l'estructura del pensament i del llenguatge que cal estudiar-la en totes les seves dimensions per tal de poder valorar els símptomes que cal tractar. Per exemple, pot ser que no sigui tan important el tractament del deliri com el de l'angoixa que aquest provoca. També caldria veure els trastorns mentals sense oblidar que moltes habilitats i capacitats estan conservades i que la seva potenciació també pot tenir un efecte curatiu.

 

Referències

 

Dörr, O. (2010) Esquizofrenia, lenguaje y evolució (o las esquizofrenias como logopatías). Actas Esp Psiquiatr 38 (1) 1-7.

 

Edward, T.R. (2016) Does Marilyn Strathern argue that the concept of nature is a social construction? Symposion, 3 (4) 437-442.

 

Fernández, M. (2003) El relativismo lingüístico en la obra de Edward Sapir. Una revisión de tópicos infundados. Teorema, XXII (3) 115-129.

 

Insúa, P.; Grijalvo, J. y Huici, P. (2001) Alteraciones del lenguaje en la esquizofrenia: síntomas clínicos y medidas psicolingüísticas. Rev Asoc Esp Neuropsiq XXI (78) 27-50.

 

Martínez, A. (2000) ¿Has visto cómo llora un Cerezo? Universidad de Barcelona, Barcelona. Pp 13-32.

 

Proyecto Voz (2016) Necesidades de las personas con esquizofrenia. http://consaludmental.org/publicaciones/necesidades-esquizofrenia-Proyecto-Voz.pdf

 

Read, J.; Masher, L.R. and Bentall, R.P. (2006) Modelos de locura. Herder, Barcelona pp 50-59.

 

Velasco, R. (2013) De-construyendo el estigma en salud mental. Psychology Society and Education. 5 (1). 91-102.

 

 

 

La fibromiàlgia, un motiu de reflexió.

Tothom que treballa en l'àmbit de les ciències de la salut pot explicar algun fracàs terapèutic amb pacients diagnosticades de fibromiàlgia. La fibromiàlgia és un procés dolorós crònic que evoluciona a brots i que es caracteritza per una distribució del dolor més o menys erràtica i amb punts gatell característics. A més, per diagnosticar una fibromiàlgia, cal descartar qualsevol altra patologia. És a dir, les proves complementàries per al diagnòstic de la fibromiàlgia són totes normals. El tractament que proposa la medicina tradicional des del seu enfocament ètic marcat per l'objectivació de fets observables és una combinació de fàrmacs antidepressius i derivats mòrfics. És a dir, es tracta el dolor si només s'objectiva dolor. Cal plantejar-se si aquesta combinació alienant de fàrmacs s'hagués proposat en malalties d'etiologia incerta que afectin majoritàriament a pacients adults del sexe masculí com va ser la SIDA als seus inicis. Els enfocaments i els resultats han estat molt diferents. I és que la medicina tradicional sempre ha maltractat les dones excepte en els casos que representen un interès per l'estructura social com la ginecologia centrada en l'edat reproductiva de la dona (Valls, 2009).

Carmen Valls (2010) amb els estudis de la diferència adopta un enfocament més sociològic aportant aspectes èmics als estudis mèdics tradicionals i afirma que, malgrat que les patologies que afecten amb més freqüència de dones solen considerar-se poc importants i no es fan estudis epidemiològics, hi ha determinats tòxics ambientals que han incrementat la taxa de càncer (el de mama i l'ús de pesticides) i l'augment de patologies associades a clínica dolorosa i cansament com la provocada pels disruptors endocrins (parabens), la manca de ferro no anemitzant molt freqüent en dones en edats fèrtils i altres tòxics. Sembla que un factor determinant del grau de sensibilitat als tòxics ambientals i de la predisposició a patir les patologies derivades d'aquesta exposició (entre les quals s'inclou la fibromiàlgia) és l'estrès. A més, l'estrès predisposa a una vulnerabilitat més gran a tòxics presents en les activitats femenines quotidianes com el DDT o els parabens (Valls, 2015).

Els estudis diferencials mostren una tendència a invisibilitzar el cos femení (poca participació de dones en estudis clínics (com la mortalitat femenina per malalties cardiovasculars), una manca d'estudis de les manifestacions femenines de les malalties (com les pacients afectades per la SIDA) i a valorar com poc importants les malalties que afecten majoritàriament les dones (com la manca de projectes subvencionats sobre malalties autoimmunes). Aquests biaixos que mostren un interès diferencial per les malalties masculines, no eximeix de la mirada ètica de la medicina que segueix cercant proves objectivables per tal de poder definir la fibromiàlgia, encara que la medicina no insisteix d'aquesta manera en la definició de les manifestacions clíniques de l'ansietat i l'estrès masculí.

De moment, no és possible definir la fibromiàlgia mitjançant una prova d'imatge o una determinació bioquímica però, això no vol dir que la fibromiàlgia no existeixi. Així, la definició de fibromiàlgia caldrà cercar-la en la vivència d'un malestar mitjançant el recorregut de les històries vitals de les pacients i cercant afinitats en els relats. Aquest fet fa que el terme fibromiàlgia substitueixi al d'histèria en la societat occidental del segle XXI tot perpetuant la imatge de la dona com una persona inadaptada, capriciosa i queixosa que expressa el seu malestar mitjançant conductes infantils. Aquesta qualificació de la dona fibromiàlgica com una categoria social que cal eliminar s´ha vist en el vídeo "Indefinida plural" quan la Maria explica la seva experiència en el tribunal mèdic per demanar la invalidesa. Tothom es creu amb el dret d'insultar-la i de menystenir-la.

Alguns autors afirmen que els malestars individuals, molts d'ells de causa social, aboquen a una patologia social greu i de difícil solució. La tendència general és a repetir els estereotips i a evitar mirades crítiques del problema que contemplin tots els factors desencadenants per tal d'oferir solucions des de la perspectiva social i més enllà dels dictats de la medicina tradicional (Rendueles, 2011). En aquesta línia, el vídeo "Indefinida plural" ( https://www.youtube.com/watch?v=QPUEhAgNoFw ) presenta una aproximació vivencial de la fibromiàlgia amb el testimoniatge de tres pacients, per tal d'obtenir una definició de la malaltia per part de qui la pateix. A la xarxa, es poden trobar altres testimoniatges de pacients amb un discurs semblant.

Les tres dones comencen la narració de la seva història de vida amb una frustració derivada del seu sexe biològic, "yo era una mujer" i per aquest motiu va haver de "negarme a mí misma y dar prioridades a los demás", "me sacaron de la escuela...mi hermano tiene buena formación", "no decir no", "soy tonta", "tenía complejo", "me sentía culpable", "me sentía que no era buena", "no me conformaba", i la llista de maneres d'anul·lar la voluntat i l'autoestima segueix però aquests exemples aportats per les pacients ja permeten veure que les tres van haver d'adaptar les seves vides a un rol no volgut. Aquest fet va generar un estat de malestar permanent "porque aguantaba cosas" i perquè s'estaven convertint, a la força en "cuidadoras y sumisas", les pacients del vídeo expressen altres aspiracions a la seva adolescència. La seva adaptació a un rol no volgut va ser mitjançant una sobre elaboració del self, el "yo puedo con todo" i, a més, deixar un espai vital per viure segons les seves voluntats, espai que el temps va convertir en una escletxa quasi imperceptible i, llavors van caure en un estat depressiu crònic. I la clínica de la fibromiàlgia comença quan la pacient es torna conscient que no pot aguantar més.

La combinació del vessant mèdic clàssic amb els estudis diferencials per sexe, l'estudi de les activitats dels diferents grups socials, les històries de vida de les pacients i el seu entorn social, ajuden a canviar la visió d'una síndrome clínica per un estil d'emmalaltir. En aquest cas, el punt de partida és un enfocament ètic i de concepció externa que defineix la fibromiàlgia segons uns criteris quantitatius predefinits. Els estudis diferencials per sexe (i aquí s'obliden els homes amb fibromiàlgia) obren la porta a un enfocament èmic i proposa la història de vida i la incorporació de dades subjectives per tal de redefinir aquesta "malaltia" com l'expressió d'un "malestar percebut".

Rendueles (2011) defineix la fibromiàlgia com un malestar personal que cerca una explicació mèdica en comptes de qüestionar la manera de viure de les pacients. Sembla que convertir-se en un problema sigui una manera de deixar de tenir problemes. Cal no oblidar que aquestes dones han sofert un procés de frustració de les seves expectatives i que no han pogut plantejar-se res per elles mateixes. També es podria conceptualitzar la fibromiàlgia com una fita del procés de victimització i de fragmentació de determinades dones que senten que no valen res i que s'afirmen en el seu malestar amb una identitat "fibromiàlgica", possiblement perquè desconeixen la seva identitat vertadera.

En el vídeo, les pacients descriuen la fibromiàlgia com un procés lent i invalidant: "duele cualquier cosa", "iba renunciando a hacer cosas", "le doy órdenes al cuerpo de moverse y no responde". Aquest procés millora quan les pacients reben el diagnòstic i desenvolupen més tolerància al dolor, "me quedé más tranquila", "el diagnóstico me dio fuerzas", "la inseguridad provoca dolor". Cal afegir que el fet de "encontrarme con otras mujeres con algo parecido" ajuda a afirmar la seva nova identitat com fibromiàlgiques, ja que el rol desenvolupat fins aquest moment és un rol imposat i que no es pot reconduir per manca d'accés als sistemes de formació de la identitat.

El patiment difús de les pacients fibromiàlgiques està relacional amb el rebuig de la seva vida quotidiana i la malaltia serveix per poder reconduir la seva vida i poder establir vincles que permetin contenir la frustració. Tonnies (1855-1936) planteja el problema de la individuació segons els tipus de relacions interpersonals que s'estableixen. Segons els seus postulats, els vincles inicials de les pacients s'establirien mitjançant relacions de poder de tipus comunitàries i el diagnòstic de la malaltia permet a les pacients la modificació dels seus vincles i establir, d'alguna manera, relacions de tipus societàries basades en pactes racionals i igualitaris entre les parts. La malaltia ajuda a les pacients a trobar estructures socials més acollidores que permeten una millora de la simptomatologia i alhora una assertivitat més gran en la construcció de la nova identitat (Pujal i Mora, 2013). El concepte d'identitat harmonitza amb les idees proposades pel construccionisme social que afirma que la percepció social de la realitat està determinada per les interaccions entre els individus i els grups i aquesta percepció es reforça per les relacions des de punts de vista semblants de la realitat. Aquesta afirmació pot ser òptima per a persones que es poden integrar a un grup social però no per persones anul·lades pel seu entorn i subordinades a tercers com és el cas de les dones que es veuen al vídeo. En casos com aquests, no serveix l'afirmació de Rendueles (2011) que apunta a la recuperació del subjecte moral que dóna coherència a les experiències vitals i permet unir els diferents jos tot permetent afrontar el malestar. Aquest autor critica el procés d'individuació postmodern que fa que els individus flotin en un desert afectiu sense cap compromís. A més, afegeix que aquest estil de vida afavoreix les identitats múltiples i febles amb una gran intolerància a l'estrès. Podria afirmar- se que la fibromiàlgia és un producte del postmodernisme. Però, quan aquesta moral tradicional no és favorable, "mi padre no me llegó a enseñar por ser mujer", "no vayas al médico", només queda el refugi del "yo puedo con todo" o bé el de "estoy cansada y me duele todo".

A diferència de Rendueles, Han (2017) afirma que l'eliminació de l'alteritat i del sentiment d'estranyesa propi del moment actual ha fet sorgir malalties lligades a un excés de positivitat. Aquestes malalties són la depressió, el TDAH, el TLP i altres síndromes que cursen amb cansament i dolor crònic (entre els que es pot incloure la fibromiàlgia). Han defineix la positivitat com una obesitat dels sistemes d'informació, comunicació i de producció que genera una violència per saturació. Això provoca un excés d'estímuls que dispersa i fragmenta la percepció de la realitat. Aquestes malalties del subjecte actual, obligat a una aportació constant de rendiments, no és el fruit d'una relació conflictiva ni implica cap dimensió d'alteritat. El que provoquen aquestes malalties del segle XXI és una incapacitat de confiar en l'altri provocant un buidament del jo mitjançant una relació autodestructiva de vivència tensa, sobreexcitada i narcisista.

Sembla que en un intent per reconstruir el jo buit amb una nova identitat, les pacients de fibromiàlgia construeixen un cos malalt per tal que la medicalització de la seva vida permeti obtenir un lloc en l'espai dialèctic social. Quan "la mujer necesita ser cuidada, genera miedo y rechazo, se niega su existencia" i d'aquesta manera inicia un discurs a la frontera social, un discurs d'alteritat tot recuperant la moral tradicional. Així, la fibromiàlgia serveix per iniciar un procés d'individuació i d'assoliment d'autonomia en poder trobar altres pacients per emmirallar-se-hi.

  

 

Bibliografia consultada

 

Han, B.C. (2017) La sociedad del cansancio. Herder. 30-67

 

Pujal, M. y Mora, E. (2013) Dolor, trabajo y su diagnóstico psicosocial de género: un ejemplo. Univ Psichol 12: 1181-1193.

 

Rendueles, G. (2011) El estado de malestar. Entrevista de Fidel Moreno. Http://www.vientosur.info/documentos/El_estado_de_malestar.pdf

 

Valls- Llobet, C. (2009) Mujeres, salud y poder. Ed. Cátedra. Pp 40-70.

 

Valls- Llobet, C. (2010) Contaminación ambiental y salud en las mujeres. Investigaciones Feministas 149-159.

 

Valls- Llobet, C. (2015) El estrés nos hace más vulnerables a los tóxicos. La Vanguardia, 26-05.

Trastorns alimentaris i estereotips socials

Els estereotips publicitaris com a referents o models a seguir poden donar lloc a una baixa autoestima i a trastorns del comportament alimentari sobretot si no s'assoleixen els objectius determinats per els estereotips. L'impacte de la publicitat pot ser més gran en els moments vitals de canvi, ja que són més necessaris els referents socials. A partir dels anys 70 es comença a utilitzar la figura masculina en els missatges publicitaris. Això ha permès la potenciació d'estereotips masculins socials. Els mitjans de comunicació proposen nous models que es fan valuosos en la societat a causa de la càrrega emotiva que incorpora el missatge publicitari. En el si de la cultura postmoderna i els seus valors (hedonisme, materialisme i individualisme), els esportistes es consideren herois i la figura del atleta jove és la que s'imposa en la societat.

Els adolescents (12- 16 anys) representen el grup més vulnerable per patir algun tipus de trastorn alimentari. L'adolescència es caracteritza per canvis dràstics físics i emocionals determinants de la maduresa sexual i física a més de l'adquisició de l'autonomia per tal d'establir un estil de vida propi. Tots aquests canvis generen una certa inestabilitat emocional i modificacions del autoconcepte que fan de l’adolescència una etapa de major susceptibilitat als dictats aliens com el de la família, amics i els mitjans de comunicació (Cabrera i Fanjul, 2012).

Els trastorns alimentaris són més freqüents a l'adolescència i no es troben diferències significatives entre classes socioeconòmiques ni entre països d’origen. Els trastorns alimentaris afecten als dos sexes amb una freqüència similar encara que amb unes manifestacions clíniques més o menys diferenciades. Així, la anorèxia que es defineix com el desig de perdre pes, d'estar prima fins aconseguir un ventre pla, és més pròpia del sexe femení, ja que encaixa amb l'ideal femení del moment amb determinades característiques físiques (bellesa, elegància, petita, seductora, veu suau, etc.) que es corresponen amb uns trets de personalitat (altruistes, emotives, amables, empàtiques, educades, etc.) determinants del rol assignat per sexe (cura dels demés i dels espais privats). Malgrat que també hi ha homes que pateixen anorèxia, aquesta se sol diagnosticar en fases més avançades, són més severes i els pacients acostumen a abandonar el tractament. Aquest fet pot trobar una explicació en el fet que els estereotips de gènere també afecten als terapeutes que, en molts casos, perceben la anorèxia com una malaltia femenina.

La bulímia es caracteritza per ingestes de menjar en grans quantitats i en poc temps associats a intents per eliminar el que s'ha menjat mitjançant purgues o provocant el vòmit.  És el trastorn de l'alimentació més freqüent en adults i els pacients presenten una manca de control del menjar, sentiments de culpa i una excessiva preocupació pel pes i la imatge corporal. És més freqüent en dones (Garcia i Toledo, 2005).

Hi ha altres trastorn de l'alimentació com l'ortoèxia (obsessió pel menjar saludable) o la drunkoèxia (deixar de menjar les calories percebudes que s'han ingerit amb la beguda alcohòlica). Molts d'aquests trastorns també es troben inclosos, o bé comparteixen símptomes, dins de les addiccions de comportament, ja que no queda clar el grau de distorsió de l'esquema corporal com a la anorèxia, la bulímia i la vigorèxia.

 

La vigorèxia o dismorfia muscular és més freqüent en adolescents del sexe masculí. Es tracta d'un trastorn alimentari que afecta sobretot a homes adolescents. De la mateixa manera que la anorèxia i la bulímia, hi ha una distorsió de la imatge corporal però qualitativament diferent de la de les dones. Així, els homes estan menys preocupats pel pes i les talles de la roba i estan més centrats en obtenir més massa muscular. Això és a causa que el model masculí ideal de la nostra societat és mesomorf, atlètic i sense greix. Entre les habilitats cognitives destaquen les habilitats físiques per davant de les altres com la capacitat per resoldre problemes o la capacitat analítica. La publicitat i els mitjans de comunicació massius difonen aquest model masculí ideal com sinònim de salut i èxit en tots els àmbits de la vida. A aquest model de masculinitat se li atribueixen els rols socials de control emocional i lideratge. Cal tenir en compte que els models que ofereix la publicitat no són per afavorir una cerca de la felicitat o de l'obtenció d'un estil de vida satisfactori sinó que la motivació de la publicitat és el clientelisme, és a dir, l'augment de les vendes de determinats productes. No sembla que, tal i com es proposa actualment,  l'obligació de presentar models amb una talla determinada o amb unes dimensions corporals més ajustades a la mitjana poblacional sigui la solució, ja que segueix invisibilitzant les persones obeses o amb “handicaps” físics i manté el rol social de qui presenten.

Es pot afirmar que els trastorns alimentaris afecten ambdós sexes per igual i comparteixen diferents trets com els factors de risc (obesitat, perfeccionisme i les influències socials). Els homes i les dones presenten una manifestació diferencial segons les diferents formes idealitzades dels cossos sexuats. D'aquesta manera, les noies opten per aconseguir un cos prim, amb un ventre pla i tenen més tendència a l’anorèxia mentre que els nois cerquen una major massa muscular. El que sembla comú a tots els models que es presenten és que no es podran assolir fàcilment i que generarà una frustració o un sentiment de fracàs alhora que també generarà un reforç de les conductes que apropen a allò que es considera ideal. En el cas de la vigorèxia, les conductes que defineixen l’obsessió per obtenir un cos atlètic són l'activitat física i l'obtenció d'un bon rendiment físic, la inducció del vòmit i l'ús de dietes i substàncies anabolitzants com els esteroides i la creatina malgrat que aquestes substàncies tenen efectes indesitjables (morts sobtades, litiasi renal, insuficiència renal aguda, ruptures fibril·lars, hèrnies discals, etc.) sobretot a l'edat de 14- 18 anys, moment en el qual, els teixits no estan del tot madurs i, a més es recomana no fer exercicis resistits fins que no acaba l'adolescència, fins després de “l’estirada” adolescent. El que sembla mentida és que els pares solen estar d'acord amb aquesta conducta i, malgrat que coneguin les conseqüències, les recolzen i afirmen que els seus fills estan sans.

Un altre tret que comparteixen aquests trastorns és l' establiment d'objectius fins a convertir la imatge ideal en una obsessió. L'exercici quantificat (sèries repetitives, calories, temps, etc.) o les dietes quantificades (pes, freqüència, resultats) permeten que cadascú estableixi objectius creixents fàcils d'assolir. Malgrat que els objectius han existit sempre, ara han canviat i ja no estan relacionats amb la supervivència o amb metes de nivell de vida. Els objectius actuals són opcions de vida, són el arribar cada dia més alt i més lluny sense més, són obsessions que generen una sensació d'anticlímax quan s'aconsegueixen i fan concentrar-se més en les xifres que en la sintonia amb el propi cos. D'aquesta manera, aquestes conductes es converteixen en una activitat mecànica addictiva que fa que s'externalitzin les decisions en la imatge ideal que cal aconseguir (Alter, 2018).

La jovenesa (17- 35 anys) és l'etapa de la vida de màxima capacitat física i en la que es determina l'estil de vida a seguir i la projecció professional. A partir dels 35 i fins els 60 anys s'inicia la senescència que són canvis físics propis de l'envelliment. Cal adaptar- se a aquests canvis com els causats per una pèrdua progressiva d'aigua dels teixits que fan perdre elasticitat a la pell, tendons i lligaments, a més de provocar una pèrdua de l'alçada dels discs intervertebrals. També hi ha una pèrdua del vigor físic i de la capacitat sexual a més de la proximitat dels canvis hormonals propis del climateri. Aquesta adaptació als canvis físics també es du a terme de manera diferenciada entre els homes i les dones. En els homes, la pèrdua de les capacitats físiques emfatitzen les activitats mentals i la imatge de l'home adult que ofereix la publicitat és un home atlètic, elegant i educat amb un rol de poder. Per exemple, la imatge de George Clooney a l'anunci de Nespresso (que segueix apropant-se a noies joves, ja que la publicitat només ofereix estereotips femenins de joventut). La manera d'apropar-se de l'home adult és des del canvi del paper sexual, ara més socialitzador.

La publicitat no ofereix una imatge ideal de dona adulta. El seu rol social assignat és el de esposa i mare i els mitjans de comunicació les fan desaparèixer cap al final de l'edat fèrtil. La majoria de les presentadores de televisió les aparten de les càmeres a partir del 45- 50 anys o les acomiaden directament. Per tal d'endarrerir els canvis físics propis de l'edat, es recorre a transformacions del cos mitjançant cirurgies, botox, trastorns de l'alimentació, etc. Aquests recursos també els utilitzen els homes però, la manca de referents de la imatge de la dona gran ideal fa que les dones quedin al caprici del seu entorn.

A partir del 60 anys, es valora més el concepte de salut i de la seva aparença. És una edat que es discrimina socialment (en el món laboral es comença a discriminar a l'edat de 40 anys) amb actituds edatistes.

Es recomana llegir les propostes d'un article de Santana i cols. (2012) que exposa els trets físics i psicològics percebuts per la població com a ideals que serveixen de base per al disseny d'anuncis publicitaris. Expliquen la manera d'obtenir els ítems que més valora la població adolescent i jove (14 als 25 anys) en un home. Aquests ítems s'han trobat reflectits fonamentalment en anuncis de suplements nutricionals, roba i perfums. I és que la publicitat tampoc ignora l'edat més freqüent de la vigorèxia ni el que demanda aquest segment poblacional.

 

Bibliografia consultada

Alter, A. (2018) Irresistible. Ed. Paidos. Pp 85- 106.

Cabrera, Y. I Fanjul, C. (2012) Influencia de los modelos publicitarios en la adolescencia: anorexia y vigorexia. RASE 5: 122-137.

Garcia, M. y Toledo, F. (2005) Nuevas adicciones: anorexia, bulimia y vigorexia. http://eoepsabi.educa.aragon.es

Santana Luna, C.; García- Santibañez, F. Y Castro, E. (2012) Vigorexia como estereotipo de los modelos masculinos de los mensajes publicitarios.Insigne Visual 4:1-13.

Flavia Company

Flavia Company, El destornillador de Texas, una reflexió.

“¿Vos creés que detrás de las cosas hay algo?

  Y no.

  Sin embargo, a veces tengo la impresión de que sí.”

          (F. Company, Volver antes que ir, 2012).

El destornillador de Texas és un conte que recull una experiència d'una escriptora o d'una professora de literatura en el desenvolupament de la seva feina. En el conte narra l'arribada i diferents aspectes de la seva estada a Texas per donar una conferència. Els fets que narra es disposen seguint un fil narratiu per ordre cronològic i units per un aspecte comú, la por.  La por entesa com una projecció mental de constructes mal utilitzats, “...menuda paranoia...” i, alhora, la por entesa com un sentiment provocat per les agències de poder per tal d'exercir un control constant en la població sota el seu mandat, “...podía acabar en el corredor de la muerte...”.  

La narradora de la història explica els fets en primera persona i en temps verbal de passat. Es tracta d'una narradora autodiegètica que relata les seves pròpies experiències com a personatge central de la història. El temps verbal en passat indica que la narradora coneix tots els fets que relata. La narradora- protagonista que explica la seva història des de la subjectivitat és a dir, es tracta d'una narració aparentment objectiva però el lector només pot veure allò que la narradora vol que veiem. Acte volitiu de qui narra que força a participar als lectors de la seva visió particular del món. Aquest punt de vista subjectiu del relat afavoreix que es pugui trobar en el text temàtiques o símbols recurrents en el paisatge psicològic de l'escriptora. Així, es troba una referència a la circularitat dels processos vitals “Pasé después todos los días...”. Tot tendeix a tornar a l'origen però, cada volta deixa la seva empremta particular. Aquesta circularitat també es troba en altres textos de F. Company com es pot trobar a “Volver antes que irse” (2012) on hi ha els versos “Los círculos de las palabras./ La verdad de la experiencia.” Aquesta circularitat iterativa que es troba en la narrativa de F. Company es pot interpretar com que l'autora dóna valor de realitat a allò que es tanca en forma de cercle com una cosa acabada i malgrat que no es pot repetir sí que es pot multiplicar en forma de cercles semblants. Aquesta circularitat també es pot trobar en l'eix vertebrador del motiu principal del relat: cada episodi que narra acaba amb una referència a l'angoixa que li provoca l'esdeveniment, “Pensé por un momento que no sabia inglés. Me asusté. Miconferencia era en inglés”. D'aquesta manera, la narradora focalitza l'atenció del lector en els pics d'angoixa de la narració. Un altre tema freqüent en la literatura d'aquesta autora és el sentiment de ser estrangera, “Ser argentina...no podía gustar”. Aquesta angoixa que apareix al moment de baixar de l'avió i que creix al llarg del seu viatge es pot interpretar com la pressa de consciència de la seva alteritat. Aquest sentiment determina la seva manera de comportar- se i dóna un significat diferent de la narrativa, no tindria aquesta angoixa una narradora Californiana. Veu als personatges que l'envolten com essers agressius amb “homofobia reinante” i amb una manera de raonar que la deixa fóra i que no entén, “Pero, ese país estaba loco”. 

La narradora del conte es presenta al lector mitjançant l'enunciació de trets que permeten identificar-la amb l'escriptora. Així, la narradora es presenta com una persona autosuficient, nascuda a Argentina, resident a Barcelona, homosexual i professora de literatura que va a donar una conferència a Texas. En la seva descripció, la veu que narra no deixa veure aspectes profunds de la seva personalitat ni estats d'ànim diferents de l'ansietat que organitza els fets narratius i dóna la clau de la lectura com quelcom subjectiu. No es tracta d'una narració de fets aterridors sinó que la por es manifesta en la frontera entre la por generada per una situació i la vivència de por de la narradora. Aquest punt de trobada provoca una situació còmica. I és que cadascú és el seu propi motiu de por. I aquest és un altre motiu de reflexió recurrent de l'autora: si som el que expliquem, si tenim por perquè és quelcom que es pot enunciar. 

En el relat, es troben condicionants que determinen la manera de mostrar els fets que s'expliquen. Molts d'aquests condicionants es poden aplegar sota el significat del mot “focalització” del relat. Es pot pensar que es tracta d'una narració de focalització interna des del punt de vista de la narradora. També es pot afegir que el relat focalitza a través d'una perspectiva limitada i explica les accions sense permetre'ns l'accés als sentiments dels personatges excepte a la por de la narradora. Així, la por de la narradora actua com una força repetitiva i generadora de l'espai textual tot marcant l'expressió temporal del ritme del temps diegètic. D'aquesta manera, la por és el lloc d'enunciació dels esdeveniments del relat que donen el significat a la narrativa. La por queda definida mitjançant una seqüència d'imatges. El temps narratiu es podria definir com el pols que marca l'agregació de càrrega simbòlica per part d'elements quotidians que queden fora del seu context habitual, “...con su mango lleno de huellas...”.

Pel que fa a la focalització del relat, es podria dir que es tracta d'una narradora quasi-omniscient o narradora de coneixement relatiu, ja que només coneix el que ella pensa però no sap el que pensen els altres personatges. Aquest tipus de focalització permet la interpretació de les emocions de la narradora. 

Un dels eixos de la narració és el temporal. Es tracta d'una narració ulterior d'una història que es considera acabada ja en l'inici de la narració. L'autora utilitza, entre altres recursos, anacronies per indicar la intensitat del sentiment d'angoixa: “treinta horas después de salir de Barcelona” (analepsis externa). Cal afegir que el temps diegètic està molt marcat a l'inici del relat i aquest es va difuminant fins a arribar al bucle final, fins a passar “cada dia” pel mateix lloc per veure el tornavís.